domingo, 31 de enero de 2010

Un hecho real


Claro que me dieron ganas de meterle dos ******* (según la RAE, lleva h) -desde que entramos en el local, no ha dejado de mirarme-, pero mientras él me provoca, yo le justifico, pienso que es un desgraciado. Claro que me violenta -cada vez que me cambio de sitio, él también lo hace, me persigue con la mirada-, pero aguanto. Claro que me da rabia, su agresividad despierta la mía, no soy un objeto. El está también en mi punto de mira. Pero no voy a disparar. No es por él, es por mí.
Esto es un hecho real. Si hablamos de palabras y poesía, hace tiempo que no hago caso de las que me enfadan. Alerta, coloco las mías.

jueves, 14 de enero de 2010

El pasado

Vivo en la carretera. cap.12. "El pasado”
Durante años, he aparcado el coche de culo en el garaje. Ahora, meto el nuevo, más ancho, de morro. Sin embargo, alguna vez, sin darme cuenta, hago las maniobras de antes con el coche de ahora. Me doy cuenta en seguida y rectifico. Pero me ataca la nostalgia. Reacciono y aparto los recuerdos.

sábado, 9 de enero de 2010

El día que conocí a Lhasa

Lhasa
De aquel viaje recuerdo un bar
pequeño y escondido
quizá recién abierto, dos personas,
parecían hermanos
por el modo en que estaban
juntos y separados, juntos
—él atendía, ella hablaba con él—;
sus colores, los pasteles, un buda y, entonces,
una música lenta, en nuestro idioma, algo rasgado y triste, con
arreglos de jazz,
que me hizo llorar —como a diario entonces—, volver
a llorar
y a mi amigo, cogerme
de la mano, detenerse conmigo otra vez —fue así nuestro viaje—;
la mujer —nos miramos serenas a través de mi llanto—
y él —consultó entre sus discos y me dijo tu nombre
orgulloso, contento—.
No quería perderte. Te conocí ese día.


Lhasa de Sela (1972-2010)