viernes, 22 de octubre de 2010

Otra vez poesía

La poesía...

Hoy he recorrido el este. He salido temprano y he visto los árboles a través de la niebla, y he visto sus hojas brillando en el agua y en el sol. He visto el cielo cambiando de color. Y la tierra amarilla.

Por la tarde me he puesto a mirar libros de poesía: Vaz, Szymborska, Olds. Me he comprado los tres.

Una vieja amiga me ha dicho que por fin empieza a entender lo que es el gusto por vivir.

Me he acordado de las estupideces que nos contaban en la universidad, como que la literatura es eso que se escribe sin que sirva para nada.

Me he pasado el día jugando.

martes, 19 de octubre de 2010

Un viejo poema que puede venir al caso

Hace muchos años, tal vez quince o dieciocho, publiqué un poema en una revista que no he podido encontrar. Sin embargo, me acuerdo casi perfectamente. Era un poema rimado, con ritmo y estructura (cercana al soneto, en versión mini). Por todo ello, fácil de memorizar. Estoy segura de que no era exactamente así, pero me acuerdo bastante bien, así que me arriesgo y lo transcribo/reescribo. Eso sí, he quitado la palabra "aferrada" porque ahora prefiero palabras más de andar por casa y pongo "agarrada". Y mantengo el "arrodilló", que es un poco exagerado, pero bueno, aunque ya no me gusta tanto el dramatismo, me voy a permitir un poquito.

Me decías en silencio
silencio, te escuchaba
con los ojos abiertos.
Silencio, yo esperaba
agarrada a la nada.
Silencio, me decías
con la boca cerrada.

Cuando la noche vino
y arrodilló mis párpados
pude leer tus labios.



Es curioso, milagroso diría, que algunos poemas que una ha escrito hace mucho, mucho tiempo, no me hablen sólo del pasado, sino que también me hablen ahora, como si los hubiera escrito otra persona: aquella que fui. Por eso pensé: quizá también te hablen a ti.


martes, 12 de octubre de 2010

Aniversario

De repente, y cada vez más a menudo, observo que hay demasiados papeles en la mesa, en la papelera, demasiados libros, carpetas, apuntes -lo de demasiado es también cada vez de menor volumen-, y me da por hacer limpieza. Hoy ha sido uno de esos días.

Curiosamente, hace poco que este blog hizo un año, desde aquello de "asusta no saber, aprender en el aire./Debo tomar impulso."

Echo en la bolsa poemas que ya terminé y están guardados a limpio, ideas que ya tomaron forma, y otras que no. Batir de alas.

Un año, treinta y siete años este agosto. Millones de tramos de línea discontinua y, como dice Lhasa -aún lo dice, quedan sus canciones-, es el viento que me manda, que me empuja a la frontera, y que borra el camino, que detrás desaparece.

No se me ocurre mejor manera de celebrar un aniversario.


martes, 5 de octubre de 2010

Lunes, última función

Se marcharon el martes,
sí, estaba previsto, pero eso no se anuncia,
sólo la última función,
la más grande y hermosa, salen todos:
los payasos, el mago, los hombres voladores,
el faquir...
Cada vez, un aplauso
mientras llenan el círculo y nos dicen
que se van,
ahora que ya nos saben suyos.
Y nos miran así, con la mano en el pecho.

El martes no hay más que un solar,
tiquets pisoteados, banderitas,
pero eso no se anuncia,
sólo la última función,
nunca el vacío.